Adblock

Los ad blockers o bloqueadores de anuncios son cualquier tipo de software que se encarga de eliminar los anuncios que aparecen en las páginas web. Estos bloqueadores se han hecho cada vez mas populares entre los internautas debido a su alta funcionalidad, encabezando las listas de extensiones de navegadores como las más descargadas.

Entre los más populares se encuentra AdBlock con unos doscientos millones de usuarios alrededor del mundo.

Quizás ya sabes de AdBlock, pero ¿sabes de donde viene su nombre?

Si te gusta la tecnología o al menos tienes contacto con ella, habrás escuchado la palabra Plugin.  En informática un Plugin, del Inglés Plug-In, no es más que un complemento de algún software.

Éstos complementos son creados para agregarle diversas funciones extras al software original. Los plugin son aplicaciones adicionales que son instaladas dentro de la aplicación principal y se ejecutan directamente en ella.

Existen miles de Plugins en la web y día a día nacen muchos más ya que éstos no solo pueden ser desarrollados por empresas reconocidas sino que también pueden ser creados por cualquier persona con ingenio y conocimientos de programación.

Existen Plugins para casi todo lo que te imagines, desde juegos y aplicaciones para entretenerse hasta herramientas un poco más útiles como antivirus, bloqueadores y aceleradores. Hoy te hablaremos de uno de los más populares en las tiendas de Navegadores web.  ¡AdBlock!

Con la llegada de la era tecnológica, los humanos nos hemos vuelto cada día más y más dependientes del Internet.

Desde revisar nuestro correo electrónico hasta contar nuestros pasos como método de ejercicio se han vuelto actividades del día a día. El Internet ya es parte de nosotros y eso es algo que las empresas han sabido aprovechar. A diferencia de la televisión, utilizamos Internet en cualquier momento del día y desde cualquier lugar, ya sea para investigar, trabajar, comunicarnos, enterarnos de lo que sucede en el mundo, chequear nuestras cuentas bancarias o simplemente pasar el rato.

Son tantas las horas que pasamos haciendo uso del Internet que la mayoría de las compañías han hecho uso de él para alcanzar un mayor impulso en sus ventas. Es imprescindible tener, por ejemplo, un correo electrónico en la empresa, una página web y ¿por qué no? quizás una página de Instagram o de Facebook, todo esto con la idea de expandir los negocios y tener mucha más publicidad. Pero ¿qué sucede cuando esa publicidad se vuelve invasiva? Pues es momento de usar AdBlock.

Como hemos venido aprendiendo en otras entregas, las extensiones para navegador permiten añadirles funciones que no son parte de su diseño original.  Podríamos decir entonces que las extensiones son accesorios que funcionan dentro del navegador.

Las extensiones se pueden instalar, desinstalar o desactivar en cualquier momento sin la necesidad de despedirnos por completo de nuestro navegador o de alterar su funcionamiento.

La función principal de las extensiones es mejorar la experiencia del usuario, ya que pueden mejorar notablemente el rendimiento de los navegadores.

Es por ello que, por ser complementos externos al navegador, es probable que nos encontremos con alguna traba a la hora de instalarlos.

A pesar de que AdBlock parece estar muy cerca de la perfección, no es así. Al igual que en todos los softwares, es probable que nos encontremos con algún bug o error en la extensión. Algunos de los más comunes van desde publicidades que siguen apareciendo al cierre inesperado de la extensión.

Pero, ¿por qué suceden estos errores? ¿por qué no funciona Adblock?

La lucha entre los bloqueadores de anuncios y las páginas web con publicidad crece cada día con los avances tecnológicos. Diariamente surge algo nuevo que necesita ser comercializado y en vista de que vivimos en una era electrónica, la web es el mejor lugar para crear anuncios.

Estudios afirman que solo en el Reino Unido el 90% de las personas de entre los 18 y 29 años utilizan las redes sociales y que los jóvenes de entre los 15 y 24 años utilizan sus teléfonos móviles en un promedio de 387 veces por día. Según estadísticas de eMarketer, como balance final del año 2017 se espera que a nivel mundial la inversión en anuncios en las redes sociales se encuentre alrededor de los 36 billones de dólares, siendo Estados Unidos y Canadá los países con mayor cantidad de dinero invertido, con 12 de los 36 billones sólo entre éstos dos países.

Como consecuencia, cada día conseguimos más anuncios en la web y muchas más páginas que sólo te muestran su contenido si miras su publicidad. Es por eso que, en posts anteriores te mostramos cómo desactivar AdBlock y ahora te enseñamos cómo habilitarlo.

Las extensiones bloqueadoras para navegadores nacieron de la necesidad de los usuarios de Internet de poder disfrutar de navegaciones seguras. Durante los últimos años, la Internet abarca prácticamente todos los aspectos de la vida cotidiana y muchas páginas han hecho uso de ella para percibir ingresos monetarios y realizar ventas a través de sus dominios.

Es por ello que cada día existe más y más publicidad en la web. Es normal que al abrir páginas como Facebook, Youtube o cualquier blog, nos encontremos con cientos de banners, videos, audios, e incluso ventanas emergentes que invaden nuestro escritorio sin nuestra autorización. A raíz de esto, se crearon los bloqueadores de publicidad; extensiones diseñadas especialmente para ofrecerle a los usuarios un mejor disfrute de la web.

Pero, ¿Cómo funcionan?

En entregas anteriores pudimos aprender como instalar Adblock, así que en esta ocasión conoceremos un poco sobre su uso.

Adblock es una herramienta de gran eficacia que diariamente crece a nivel mundial. Su popularidad se ha incrementado a lo largo de los años en porcentajes inimaginables debido a su alto indice de eficiencia en cuanto a bloqueadores se refiere.

Muchas veces la sencillez es de gran atractivo en la vida cotidiana y Adblock nos proporciona un buen número de opciones en un menú bastante sencillo de utilizar.